La droga Tina y su impacto en las prácticas de chemsex
En Centros Vidanova seguimos con nuestra labor de concienciación sobre el consumo de drogas y el riesgo del chemsex, poniendo el foco esta vez en una sustancia que ha ganado presencia en este tipo de encuentros: la droga Tina, también conocida como cristal o meth.
¿Qué es la droga Tina?
La Tina pertenece a la familia de las metanfetaminas, un potente estimulante del sistema nervioso central. Su consumo genera una intensa sensación de euforia, hiperactividad, deseo sexual elevado y supresión de funciones fisiológicas como el hambre, el sueño o el cansancio. Estas características la hacen especialmente atractiva en contextos de sexo prolongado bajo los efectos de sustancias, también conocido como chemsex.
Modo de consumo y efectos inmediatos
La Tina se presenta en forma de cristales, normalmente incoloros o blancos, y se puede fumar con pipa, ingerir por vía oral, esnifar o incluso inyectar, lo que la convierte en una droga altamente versátil y, por tanto, peligrosa. Su método más habitual de consumo en sesiones de chemsex es mediante pipa de cristal, utilizando un mechero o soplete para calentar el cristal y aspirar el humo.
Esta forma de consumo se parece al del Alfa (3-MMC), pero la Tina produce un humo más denso y blanco, y un efecto más duradero e intenso. Los efectos aparecen casi de inmediato y pueden prolongarse durante horas, lo que conlleva un alto riesgo de sobredosis y deterioro físico y mental.
Diferencias entre Tina y Alfa
Aunque ambas se consumen en contextos similares, existen diferencias notables entre la Tina y el Alfa:
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La Tina tiene una presentación cristalina y más estable al calor, mientras que el Alfa suele aparecer en forma de polvo o pequeñas piedras.
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Los efectos de la Tina son más potentes y duraderos, con mayor riesgo de hiperestimulación, brotes psicóticos y paranoia.
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El Alfa se degrada con el calor dejando residuos líquidos en la pipa, mientras que la Tina mantiene su forma o se disuelve de forma más limpia.
Puedes leer más sobre esto en nuestro artículo específico sobre las diferencias entre Tina y Alfa.
Consecuencias del consumo de Tina
El consumo continuado de Tina provoca graves consecuencias físicas y mentales:
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Trastornos cardiovasculares: hipertensión, arritmias e incluso riesgo de infarto.
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Alteraciones del sueño y la alimentación: el cuerpo entra en estado de alerta extrema, impidiendo el descanso y generando una fatiga acumulada muy peligrosa.
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Psicosis y paranoia: pensamientos delirantes, comportamiento agresivo, alucinaciones o desconexión de la realidad.
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Dependencia inmediata: la necesidad de mantener el estado de excitación durante sesiones prolongadas hace que se consuma Tina de forma compulsiva.
Todo esto convierte a esta sustancia en una de las más difíciles de abandonar sin apoyo terapéutico.
Cómo dejar la droga Tina
Dejar de consumir Tina no es solo dejar una sustancia, es cortar con una dinámica social y sexual muy arraigada. Muchos usuarios asocian el consumo a su manera de relacionarse, lo que complica aún más el proceso de abandono.
Por eso, desde Centros Vidanova, ofrecemos un tratamiento integral, en el que no solo se aborda la adicción desde el punto de vista físico, sino también emocional, relacional y conductual, para ayudarte a recuperar una vida sexual y social sana, libre de drogas.
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Nuestra labor como centro de desintoxicación en Valencia es darte toda la información posible y ofrecerte un espacio seguro para empezar de nuevo.
En nuestro centro de estancia, trabajamos mediante el Método Minnesota con terapias de grupo, atención individual y acompañamiento 24h. También ofrecemos un tratamiento ambulatorio adaptado a aquellas personas que quieren mantener su vida laboral o familiar mientras comienzan su recuperación.
No importa cuál sea tu punto de partida. Lo importante es que quieres salir adelante. En Vidanova te ayudaremos a dejar atrás cualquier adicción y reconstruir tu vida con sentido, calma y salud.